Las recientes tarifas por consumo de agua potable y alcantarillado en Salcedo han provocado malestar ciudadano. María Ramírez, directora encargada de Agua Potable y Alcantarillado, confirmó que se ha registrado un alto número de reclamos por parte de usuarios que consideran elevados los valores facturados.

Aunque la reforma a la ordenanza fue socializada previamente, los ciudadanos se mostraron inconformes. Ramírez aclaró que las tarifas varían según el tipo de usuario: no es igual el pago de una familia a la de un comerciante o arrendador de departamentos.

El cobro del servicio de alcantarillado generó mayor polémica. En varios casos superó el valor del agua potable, ya que representa un recargo del 70% sobre el volumen consumido. Este valor se justifica, según la funcionaria, por los costos elevados del tratamiento de aguas residuales, que llegan con desechos sólidos, vísceras de pescado y residuos agrícolas.

La planta de Mulliquindil Santa Ana ya superó su capacidad, mientras que la de Antonio José Holguín colapsó por un aluvión. El Municipio contrató su repotenciación por USD 46.000 con un plazo de 90 días y aplicó un plan de contingencia.

Ramírez pidió un uso consciente del agua, advirtió sobre sanciones a quienes descargan residuos industriales y ofreció atención personalizada para resolver dudas sobre las planillas. Afirmó que las plantas fueron diseñadas para tratar aguas domésticas, no industriales.